viernes, 9 de mayo de 2014

que aso con aquellos caballeros

los caballeros no existen

que piensas de los caballeros

los caballeros y las damas ¿donde quedaron?

¿Qué les pasa?

¿Por qué si dicen que les gustan caballeros salen con tanto patán?
Otra de esas cosas que pueden no saber de mí, es que aunque creo firmemente en que en las relaciones entre mujeres y hombres debe haber simetría, sigo creyendo en la galantería; o por lo menos en un nivel de galantería que encuentro natural. Detalles como bajarme del carro o levantarme de la silla para saludar, abrir la puerta y ofrecer que pasen antes de hacerlo yo, ceder una silla cuando todas están ocupadas, preguntar qué quiere y ordenar para ustedes antes que para mí en un restaurante, son cosas que me salen naturalmente.
El tema es que si bien hay detalles de galantería que me salen naturalmente hay otros en los que encuentro mucha hipocresía; y no soy solo yo. Una vez por ejemplo, abrí una puerta y cedí el paso a una mujer que no encontró en el gesto algo digno de celebrar. En esa oportunidad por dármelas de caballero me gané un tremendo regaño. Me dijo hasta de que me iba a morir; que si yo creía que ella no podía abrir la puerta sola, que mejor me ocupara de mi mismo y de mi destino antes de cederle el paso, que si iba a hacer eso lo hiciera por alguien que lo necesitara, que si haría lo mismo por un hombre, que si acaso yo creía que porque era mujer no podía sola y así.
Y me quedé pensando en tanta mujer queriendo que, así fuera por pura galantería, tuvieran con ellas un pequeño gesto de amabilidad. También en tantas que dan a esos pequeños gestos de amabilidad más importancia de la que tienen. Que les den serenata y les ofrezcan flores; que les carguen las maletas en las que llevan más equipaje del que necesitan; que les den abrigo cuando sienten frío… Gestos que está muy bien si de verdad los quieren, pero que no hacen una relación, ni tampoco al “galán” un galán.
El tema es que por más serenatas y flores que les ofrezcan, si el hombre es un patán no hay detalle  que lo redima. Es más, conozco más patanes que regalan serenatas y flores, que caballeros que no lo hacen y que aun así lo son. Tanto que creo que los que andan con tanta galantería son más dignos de sospecha, que de admiración. En serio, sobre todo si los gestos se dan con insistente regularidad.
Pero no solo hay hipocresía en el exceso de galantería de un hombre hacia una mujer, también en el deseo excesivo de galantería de una mujer. Y no solo porque quieran, con la disculpa de la caballerosidad, que hagan de todo por ustedes, sino porque queriéndola demuestran que solo un hombre las puede hacer sentir especiales. Entonces me pregunto, si eso de empacar siempre más de lo que necesitan, no será una forma de probar si uno se rompe la espalda por ustedes. Y también por la maldita costumbre que tienen de vivir desabrigadas.
Y es que en el imaginario de casi todas las mujeres, no hay detalle de galantería que más demuestre lo caballeroso de un hombre que el de ofrecer a una mujer su abrigo cuando esta tiene frío. Igual no se explica uno, que con toda la ropa que compran, no tenganropa para el frío, o que si la compran, no la usen cuando salen con uno. ¿No dicen que son súper precavidas? En fin…
Porque hay tanto patán que se las da de caballero y tanta caballerosidad que se ofrece sin naturalidad, es que uno no se explica por qué si gustándoles caballeros, salen con tanto patán. ¿Qué les pasa?